Dentro de nuestras fórmulas

En la base de cada fórmula reside un profundo respeto por la pureza, la tradición y el abastecimiento intencional. Seleccionamos cada ingrediente no solo por su eficacia natural, sino también por su origen, priorizando productos botánicos de cosecha ética, comercio justo y de larga tradición. Desde las tierras altas de Etiopía hasta los campos de África Occidental, cada elemento se selecciona con esmero para nutrir la piel y honrar la tierra de la que proviene.

Café etíope de comercio justo
Nuestro ingrediente estrella, el café etíope orgánico y de comercio justo, es rico en antioxidantes que ayudan a proteger la piel del daño ambiental. Su contenido natural de cafeína estimula la circulación, lo que puede ayudar a reducir la apariencia de celulitis e hinchazón. El café finamente molido también actúa como un exfoliante suave, eliminando las células muertas de la piel para revelar una tez más suave y radiante.

Sal rosa del Himalaya
Naturalmente rica en minerales como magnesio, calcio y potasio, la sal rosa del Himalaya ayuda a desintoxicar y equilibrar la piel. Su suave textura exfoliante elimina las impurezas, restaura la hidratación y promueve un tono suave y uniforme. Además, posee propiedades antimicrobianas, lo que la hace ideal para limpiar y renovar la piel.

Manteca de cacao
La manteca de cacao, un emoliente profundamente hidratante, forma una barrera protectora sobre la piel, reteniendo la hidratación y ayudando a mejorar la elasticidad. Su alta concentración de ácidos grasos y fitoquímicos nutre la piel seca, sensible o envejecida, favoreciendo una textura más suave y flexible con el tiempo.

Manteca de karité
Reconocida por sus propiedades curativas, la manteca de karité es rica en vitaminas A y E, así como en ácidos grasos esenciales. Alivia la inflamación, favorece la regeneración cutánea y ayuda a calmar afecciones como el eccema y la sequedad. La manteca de karité proporciona una hidratación duradera y promueve una barrera cutánea saludable.

Aceite de mirra
Utilizado durante siglos en el cuidado tradicional de la piel, el aceite de mirra es valorado por sus potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Ayuda a mejorar el tono y la textura de la piel, reduce el enrojecimiento y favorece la cicatrización de heridas. Su aroma calmante también aporta un efecto estabilizador y reparador a cualquier ritual de cuidado de la piel.

Aceite de incienso
El aceite de incienso es venerado por sus efectos rejuvenecedores y tonificantes sobre la piel. Favorece la regeneración celular, reduce la apariencia de imperfecciones y arrugas, y ayuda a reafirmar y tensar la piel cansada o madura. Su aroma cálido y resinoso realza la experiencia sensorial de cualquier rutina de cuidado de la piel.

Aceite de vitamina E
El aceite de vitamina E, un potente antioxidante, protege la piel del daño de los radicales libres a la vez que promueve la hidratación y la cicatrización. Favorece la reparación de la piel, reduce la apariencia de cicatrices y suaviza las líneas de expresión, lo que lo convierte en un producto básico en las fórmulas naturales antienvejecimiento.

Miel
La miel, un humectante natural, absorbe la humedad de la piel a la vez que ofrece suaves propiedades antibacterianas y cicatrizantes. Alivia la irritación, desobstruye los poros y favorece una tez radiante y saludable. Nuestra miel es un ingrediente clave para mantener el equilibrio y la suavidad en cada fórmula.

Hojas de té verde
Ricas en polifenoles, las hojas de té verde ofrecen potentes beneficios antioxidantes y antiinflamatorios. Calman el enrojecimiento, ayudan a reparar el daño solar y combaten el envejecimiento prematuro neutralizando los radicales libres. Su contenido natural de cafeína también puede revitalizar y refrescar la piel apagada o cansada.

Cúrcuma
La cúrcuma, un remedio ancestral en los rituales de belleza tradicionales, es reconocida por sus propiedades iluminadoras y antiinflamatorias. Ayuda a reducir las manchas oscuras, calmar la irritación y unificar el tono de la piel. Su compuesto activo, la curcumina, favorece la claridad y luminosidad general de la piel.